José Donoso, Director General de UNEF[/caption]
Un año récord en potencia instalada a nivel internacional, de importantes compromisos y de subastas energéticas en las cuales los bajos precios ofertados que sorprendieron en el 2015 se han convertido en la norma. Subastas internacionales en las cuales las empresas españolas han cosechado éxitos importantes que han permitido demostrar su posición de liderazgo internacional en el sector.
Globalmente, 2016 ha estado marcado por la ratificación del Acuerdo de París, el primer pacto universal de lucha contra el cambio climático que fue ratificado por más de 200 países, y por el que nos hemos comprometido a limitar el aumento de la temperatura por debajo de los 2ºC con respecto a los niveles preindustriales. Este compromiso ha marcado un antes y un después en las polí- ticas nacionales e internacionales, estableciendo el camino para alcanzar el modelo energético futuro con un mix sostenible que sustituya al carbón. Aunque también ha sido el año en el cual la elección de Trump marca una nube sobre el mismo.
Asimismo, en el año que nos deja se ha alcanzado un nuevo récord en potencia instalada -50GW- debido al fuerte impulso de grandes potencias como China, Japón y Estados Unidos.
Ya en España, nuestra agenda ha estado marcada por la inestabilidad y la repetición de elecciones, que han impedido la concreción de las reformas en el Real Decreto 900/2015 de Autoconsumo que se acordaron con el conjunto de partidos de la oposición en el Acuerdo de Marzo. La alternativa: una regulación que impulse esta modalidad de producción de energía solidaria con el medio ambiente y que, al mismo tiempo, supone una herramienta para luchar contra la pobreza energética. Desde que se anunciara la intención de gravar la producción de energía solar para autoconsumo con el popularmente conocido como ‘Impuesto al sol’, UNEF ha estado luchando para eliminar las barreras legislativas y económicas de un derecho cí- vico cuyo desarrollo supondría, en el mejor de los casos, que el sistema eléctrico deje de cobrar 12 millones de euros, una cantidad pequeña para un sector que factura más de 18.000 millones.
La improvisación con la cual se llevó a cabo la aprobación del RD 900/215 ha producido una situación en la cual un año después no han podido cobrar todavía por el ‘Iimpuesto al sol’, habiéndose consagrado como barrera al desarrollo del autoconsumo más las dificultades administrativas por la falta de aprobación de procedimientos homogéneos de tramitación que la barrera económica. Aunque, a pesar de ello, y a falta de datos definitivos del desarrollo de mercado que dispondremos en enero, la percepción es de continuo desarrollo del autoconsumo, particularmente en algunos nichos de mercados como el agrario y agroalimentario.
Por otra parte, el éxito de las subastas energéticas realizadas en países como México, donde la tecnología fotovoltaica se ha adjudicado el 75% de los proyectos ganadores con un precio de 36 euros/MWh, ha demostrado la idoneidad de un sistema que en España necesita aún de ciertas pautas que garanticen la neutralidad y uncorrecto funcionamiento para cumplir con los objetivos marcados para 2020.
En este sentido el anuncio por parte del Ejecutivo de la celebración de subastas energéticas de entre 1.000 MW y 4.000 MW, tecnológicamente neutrales, es decir, en las que todas las tecnologías pueden competir, ha abierto importantes perspectivas de reactivación del sector en nuestro país. Con respecto al diseño de las subastas, desde UNEF reclamamos que se establezca un sistema abierto, transparente y no discriminatorio para las energías renovables, que se enmarque en una planificación a largo plazo, la experiencia internacional y con un diálogo constante con los agentes implicados. Además, creemos que es fundamental que las subastas se realicen sobre kWh producidos, en lugar de sobre potencia instalada, y que se reserve el 20% a los proyectos más pequeños, para impulsar un desarrollo más ordenado y equitativo del sector.
Todos estos hitos nos permiten albergar esperanza en el impulso del sector fotovoltaico en 2017. Contamos con muchas empresas que ya han consolidado su posición de liderazgo en el exterior y que se encuentran a la espera de una reactivación del mercado en España. Una reactivación deseable para el conjunto de la economía española por nuestra capacidad para generar empleo y riqueza gracias a nuestra dilatada experiencia y desarrollo tecnológico.
Desde UNEF deseamos que 2017 sea el año del sol, de las energías limpias, del desarrollo en el cumplimiento de nuestros compromisos medioambientales para 2020 y de la continuación de la recuperación del sector
Artículo publicado en Energética XXI (diciembre 2016) La energía fotovoltaica sigue avanzando
18 ene 2017
[caption id="attachment_7124" align="alignleft" width="331"] José Donoso, Director General de UNEF[/caption]
Un año récord en potencia instalada a nivel internacional, de importantes compromisos y de subastas energéticas en las cuales los bajos precios ofertados que sorprendieron en el 2015 se han convertido en la norma. Subastas internacionales en las cuales las empresas españolas han cosechado éxitos importantes que han permitido demostrar su posición de liderazgo internacional en el sector.
Globalmente, 2016 ha estado marcado por la ratificación del Acuerdo de París, el primer pacto universal de lucha contra el cambio climático que fue ratificado por más de 200 países, y por el que nos hemos comprometido a limitar el aumento de la temperatura por debajo de los 2ºC con respecto a los niveles preindustriales. Este compromiso ha marcado un antes y un después en las polí- ticas nacionales e internacionales, estableciendo el camino para alcanzar el modelo energético futuro con un mix sostenible que sustituya al carbón. Aunque también ha sido el año en el cual la elección de Trump marca una nube sobre el mismo.
Asimismo, en el año que nos deja se ha alcanzado un nuevo récord en potencia instalada -50GW- debido al fuerte impulso de grandes potencias como China, Japón y Estados Unidos.
Ya en España, nuestra agenda ha estado marcada por la inestabilidad y la repetición de elecciones, que han impedido la concreción de las reformas en el Real Decreto 900/2015 de Autoconsumo que se acordaron con el conjunto de partidos de la oposición en el Acuerdo de Marzo. La alternativa: una regulación que impulse esta modalidad de producción de energía solidaria con el medio ambiente y que, al mismo tiempo, supone una herramienta para luchar contra la pobreza energética. Desde que se anunciara la intención de gravar la producción de energía solar para autoconsumo con el popularmente conocido como ‘Impuesto al sol’, UNEF ha estado luchando para eliminar las barreras legislativas y económicas de un derecho cí- vico cuyo desarrollo supondría, en el mejor de los casos, que el sistema eléctrico deje de cobrar 12 millones de euros, una cantidad pequeña para un sector que factura más de 18.000 millones.
La improvisación con la cual se llevó a cabo la aprobación del RD 900/215 ha producido una situación en la cual un año después no han podido cobrar todavía por el ‘Iimpuesto al sol’, habiéndose consagrado como barrera al desarrollo del autoconsumo más las dificultades administrativas por la falta de aprobación de procedimientos homogéneos de tramitación que la barrera económica. Aunque, a pesar de ello, y a falta de datos definitivos del desarrollo de mercado que dispondremos en enero, la percepción es de continuo desarrollo del autoconsumo, particularmente en algunos nichos de mercados como el agrario y agroalimentario.
Por otra parte, el éxito de las subastas energéticas realizadas en países como México, donde la tecnología fotovoltaica se ha adjudicado el 75% de los proyectos ganadores con un precio de 36 euros/MWh, ha demostrado la idoneidad de un sistema que en España necesita aún de ciertas pautas que garanticen la neutralidad y uncorrecto funcionamiento para cumplir con los objetivos marcados para 2020.
En este sentido el anuncio por parte del Ejecutivo de la celebración de subastas energéticas de entre 1.000 MW y 4.000 MW, tecnológicamente neutrales, es decir, en las que todas las tecnologías pueden competir, ha abierto importantes perspectivas de reactivación del sector en nuestro país. Con respecto al diseño de las subastas, desde UNEF reclamamos que se establezca un sistema abierto, transparente y no discriminatorio para las energías renovables, que se enmarque en una planificación a largo plazo, la experiencia internacional y con un diálogo constante con los agentes implicados. Además, creemos que es fundamental que las subastas se realicen sobre kWh producidos, en lugar de sobre potencia instalada, y que se reserve el 20% a los proyectos más pequeños, para impulsar un desarrollo más ordenado y equitativo del sector.
Todos estos hitos nos permiten albergar esperanza en el impulso del sector fotovoltaico en 2017. Contamos con muchas empresas que ya han consolidado su posición de liderazgo en el exterior y que se encuentran a la espera de una reactivación del mercado en España. Una reactivación deseable para el conjunto de la economía española por nuestra capacidad para generar empleo y riqueza gracias a nuestra dilatada experiencia y desarrollo tecnológico.
Desde UNEF deseamos que 2017 sea el año del sol, de las energías limpias, del desarrollo en el cumplimiento de nuestros compromisos medioambientales para 2020 y de la continuación de la recuperación del sector
Artículo publicado en Energética XXI (diciembre 2016)
José Donoso, Director General de UNEF[/caption]
Un año récord en potencia instalada a nivel internacional, de importantes compromisos y de subastas energéticas en las cuales los bajos precios ofertados que sorprendieron en el 2015 se han convertido en la norma. Subastas internacionales en las cuales las empresas españolas han cosechado éxitos importantes que han permitido demostrar su posición de liderazgo internacional en el sector.
Globalmente, 2016 ha estado marcado por la ratificación del Acuerdo de París, el primer pacto universal de lucha contra el cambio climático que fue ratificado por más de 200 países, y por el que nos hemos comprometido a limitar el aumento de la temperatura por debajo de los 2ºC con respecto a los niveles preindustriales. Este compromiso ha marcado un antes y un después en las polí- ticas nacionales e internacionales, estableciendo el camino para alcanzar el modelo energético futuro con un mix sostenible que sustituya al carbón. Aunque también ha sido el año en el cual la elección de Trump marca una nube sobre el mismo.
Asimismo, en el año que nos deja se ha alcanzado un nuevo récord en potencia instalada -50GW- debido al fuerte impulso de grandes potencias como China, Japón y Estados Unidos.
Ya en España, nuestra agenda ha estado marcada por la inestabilidad y la repetición de elecciones, que han impedido la concreción de las reformas en el Real Decreto 900/2015 de Autoconsumo que se acordaron con el conjunto de partidos de la oposición en el Acuerdo de Marzo. La alternativa: una regulación que impulse esta modalidad de producción de energía solidaria con el medio ambiente y que, al mismo tiempo, supone una herramienta para luchar contra la pobreza energética. Desde que se anunciara la intención de gravar la producción de energía solar para autoconsumo con el popularmente conocido como ‘Impuesto al sol’, UNEF ha estado luchando para eliminar las barreras legislativas y económicas de un derecho cí- vico cuyo desarrollo supondría, en el mejor de los casos, que el sistema eléctrico deje de cobrar 12 millones de euros, una cantidad pequeña para un sector que factura más de 18.000 millones.
La improvisación con la cual se llevó a cabo la aprobación del RD 900/215 ha producido una situación en la cual un año después no han podido cobrar todavía por el ‘Iimpuesto al sol’, habiéndose consagrado como barrera al desarrollo del autoconsumo más las dificultades administrativas por la falta de aprobación de procedimientos homogéneos de tramitación que la barrera económica. Aunque, a pesar de ello, y a falta de datos definitivos del desarrollo de mercado que dispondremos en enero, la percepción es de continuo desarrollo del autoconsumo, particularmente en algunos nichos de mercados como el agrario y agroalimentario.
Por otra parte, el éxito de las subastas energéticas realizadas en países como México, donde la tecnología fotovoltaica se ha adjudicado el 75% de los proyectos ganadores con un precio de 36 euros/MWh, ha demostrado la idoneidad de un sistema que en España necesita aún de ciertas pautas que garanticen la neutralidad y uncorrecto funcionamiento para cumplir con los objetivos marcados para 2020.
En este sentido el anuncio por parte del Ejecutivo de la celebración de subastas energéticas de entre 1.000 MW y 4.000 MW, tecnológicamente neutrales, es decir, en las que todas las tecnologías pueden competir, ha abierto importantes perspectivas de reactivación del sector en nuestro país. Con respecto al diseño de las subastas, desde UNEF reclamamos que se establezca un sistema abierto, transparente y no discriminatorio para las energías renovables, que se enmarque en una planificación a largo plazo, la experiencia internacional y con un diálogo constante con los agentes implicados. Además, creemos que es fundamental que las subastas se realicen sobre kWh producidos, en lugar de sobre potencia instalada, y que se reserve el 20% a los proyectos más pequeños, para impulsar un desarrollo más ordenado y equitativo del sector.
Todos estos hitos nos permiten albergar esperanza en el impulso del sector fotovoltaico en 2017. Contamos con muchas empresas que ya han consolidado su posición de liderazgo en el exterior y que se encuentran a la espera de una reactivación del mercado en España. Una reactivación deseable para el conjunto de la economía española por nuestra capacidad para generar empleo y riqueza gracias a nuestra dilatada experiencia y desarrollo tecnológico.
Desde UNEF deseamos que 2017 sea el año del sol, de las energías limpias, del desarrollo en el cumplimiento de nuestros compromisos medioambientales para 2020 y de la continuación de la recuperación del sector
Artículo publicado en Energética XXI (diciembre 2016)