El despliegue del sector fotovoltaico previsto para la próxima década es compatible con el respeto del medioambiente

  • UNEF plantea que las plantas fotovoltaicas en suelo se conviertan en “reservas integrales de la naturaleza” a través de medidas como la instalación de nidales y de hoteles de insectos y el fomento del uso del terreno de la instalación para pasto.
  • La buena elección de la ubicación en la fase de diseño de la planta es fundamental para mitigar los impactos negativos.
  • Economía circular y reciclaje de materiales, elementos clave en la fase de diseño y desmantelamiento de las instalaciones.

Madrid, 20 de mayo de 2020. UNEF ha celebrado ayer un nuevo diálogo virtual abierto sobre “La sostenibilidad de las plantas fotovoltaicas” retransmitido en directo desde el canal de YouTube, dentro de la iniciativa #DialogosSolaresDesdeCasa.

En este diálogo, moderado por Antonio Cerrillo, de La Vanguardia, han participado Arancha Martínez, Presidenta de UNEF; Helena Fernández, Sustainable and Climate Change Manager de ISEMAREN; Rodrigo Irúrzun, Miembro del Área de Energía de Ecologistas en Acción y Eugenio J. Dominguez Collado, Subdirector General de Evaluación Ambiental de la Secretaria de Estado de Medio Ambiente (MITECO).

Los expertos han coincidido en señalar que el despliegue de las energías renovables previsto por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, según el cual hacen falta del orden de 60 GW de nueva capacidad renovable en los próximos años, es compatible con el respeto del medioambiente, porque España dispone de recurso suficiente en términos de territorio, elemento clave en la instalación de los parques fotovoltaicos en suelo.

Por su parte, Rodrigo Irúrzun ha señalado “Uno de los aspectos fundamentales de la crisis ambiental que vivimos es la crisis energética y climática. Las energías renovables, junto al ahorro y la eficiencia energética, jugarán sin duda un papel fundamental en la transición ecológica. Sin embargo, como cualquier actividad humana, pueden generar impactos no deseados de los que debemos ser conscientes y minimizar en la medida de lo posible. El desarrollo de las energías renovables debe ser acorde con la preservación de la biodiversidad y el equilibrio ecológico, el consumo de materiales y la minimización de la contaminación generalizada”.

Entre los principales impactos de las plantas fotovoltaicas, Eugenio J. Dominguez Collado ha señalado “un uso muy intensivo del territorio y el impacto paisajístico de las líneas eléctricas aéreas, que generan impactos directos sobre la biodiversidad, especialmente por mortandad directa de avifauna por colisión con cables de tierra y conductores”.

A este respecto, Arancha Martínez ha recordado que “el sector fotovoltaico está comprometido con la mitigación del impacto de las plantas en suelo, tal y como se pone de manifiesto en el documento ‘Recomendaciones de mejores prácticas para la sostenibilidad ambiental de las instalaciones fotovoltaicas que’ hemos elaborado”. Desde UNEF, se plantea que las plantas en suelo se conviertan en “reservas integrales de la naturaleza”, objetivo que se puede conseguir implementando medidas como la instalación de nidales y de hoteles de insectos, el fomento del uso del terreno de la instalación para pasto, siempre que sea viable en función de la cercanía de actividades ganaderas, el respeto de la formación natural de la capa vegetal vigilando que se cumplan las prohibiciones de uso de herbicidas y apostando por un vallado que permita el paso de aves y otros animales, evitando la fragmentación de los hábitats naturales de las especies locales.

Por su parte, Helena Fernández ha destacado: “Los impactos negativos de las plantas pueden mitigarse en fase de diseño mediante una buena elección del espacio a ocupar. En este sentido, una evaluación ambiental y urbanística previa es fundamental porque, además de limitar impactos, reduce plazos. Además, es importante incorporar medidas preventivas y correctivas realistas a través de estudios y datos que el sector debería trabajar en colaboración con la administración. En la fase de operación, la gestión es fundamental para reducir su impacto y la a Huella de Carbono es una buena herramienta en este sentido”.

La Administración está comprometida con la agilización de la tramitación de las plantas fotovoltaicas

Desde la Administración, se ha reafirmado el compromiso para que se pueda dar una respuesta rápida a las solicitudes transmitidas por los promotores, agilizando la tramitación administrativa,  a través de la elaboración de mapas de capacidad de acogida y guías que incluyen recomendaciones sobre los criterios clave a introducir en la Declaración de Impacto Ambiental, trámite clave para asegurar la máxima integración de los proyectos en los territorios que los acogen que tiene que ser completo en cuanto a la selección de alternativas de ubicación y los estudios de avifauna.

Economía circular y reciclaje de materiales, elementos clave en la fase de diseño y desmantelamiento de las instalaciones

Los expertos han coincidido en señalar la importancia de adoptar una estrategia de ingeniería inversa que, partiendo de la fase de fabricación de los componentes eléctricos y electrónicos de una planta fotovoltaicas, permita tener en consideración los principios de reciclaje y de economía circular con el fin de minimizar la generación de residuos y el consumo de recursos en la fase de desmantelamiento de la instalación.

El próximo diálogo de la serie #DiálogosSolaresDesdeCasa se celebrará el jueves, 21 de mayo, a las 12:00 horas, sobre el cálculo de estructuras para instalaciones de autoconsumo.

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